Encontrarse con el taller literario (en Artigas) de mi compañera de estudios Celeste Paiva después de tanto tiempo fue muy bello (como cuando me encontré con Gricel Milesi en Fray Bentos) son experiencias inolvidables. Una persona amiga de Dina Díaz, de Toledo, España. Con Nelson Landa, gente del taller de Garet cuando tenía su taller allí, Landa también había ganado premios en Fondos Concursables cuando presentamos los libros en el Solís, también con mención en la Intendencia de Montevideo. Mucha gente de la cultura, todos con tanta calidez. Un recibimiento muy cálido, muy sentido, aplausos que no terminaban. Cuando culminamos el evento, la gente no se levantaba, quería más contacto con la palabra como sedientos de estas actividades. No es fácil llegar a Artigas, hicimos cinco horas de ida y cinco de vuelta desde Paysandú. Pero como vale la pena! El sonido de ese piano no dejó de parar entre luces de distintos colores, penumbras que hacían llegar al gusto total por la poesía, el cuento, el teatro, el canto junto a nuestros pares.
Ha sido una gran experiencia, conocer también la realidad de cada lugar y mostrar nuestro trabajo con la integración de las demás artes, los libros publicados por taller. Volvimos en la madrugada con la convicción plena de haber cumplido con nosotros mismos y con esa felicidad íntima de haber realizado lo que realmente sentimos y amamos hacer. Comparto algunas fotos en adjuntos.